Ni Prada ni Manhattan 1.0: La (desgraciadamente) boda de mi mejor amigo

La (desgraciadamente) boda de mi mejor amigo

Publicado por Simone Marie en ,

Son las 18:00 de la tarde del 20 de Abril, mi ubicación es el sofá y mi quehacer ver la televisión, hoy es fiesta en Valencia y el aburrimiento es total.

Suena el timbre de un modo poco conocido que sólo significa “visita”, sé quien es porque ha avisado que vendría e imagino a lo que viene, pero eso no mitiga mi impulso de huir de ella como si del humo negro se tratara.

Cuando le abro la puerta veo que tiene algo en la mano…mis sospechas se están confirmando pero intento tener esperanzas “un sobre es sólo un sobre y no tiene por qué significar lo que estás pensando” me dije, pero todas mis esperanzas se esfumaron cuando ya sentados, y pasada la charla de siempre sobre el tiempo, me entregó el sobre como una sentencia de muerte, el tono cursi de lo que había dentro sólo lo confirmó...invitación de boda.

Me encuentro en el reducido grupo de mujeres que tienen alergia al matrimonio. No es en realidad miedo al compromiso sino pánico al sarao.

Lo de establecer una unión con tu pareja sea del sexo, religión o raza que sea me parece no sólo perfecto sino maravilloso, es en sí el día de la boda, el organizarla durante meses, el elegir un traje, el sentar a los familiares peleados donde no se peleen demasiado, el “que se besen”, el “que se besen los padrinos”, “el que se besen las parejas de los padrinos”, el corta la tarta con la espada, el quítate la liga, el ser el objeto de atención constante...es todo eso con lo que, señores, no puedo.

Eso en caso de una boda propia, pero es que ser invitado a una boda ajena no es un marrón??. Siempre respetas la decisión de los demás a hacerlo aunque no sea de tu agrado, e incluso si es un familiar o persona cercana te puede hacer ilusión, pero es innegable a lo que nos enfrentamos cuando nos dan el tarjetón, chorreo de dinero!!

No es sólo la pasta que tienes que soltar en el cazo, es todo lo demás.
Los hombres parece que lo tenéis más fácil, nadie se fija en si el traje lo usasteis en otra ocasión, pero que la mujer repita traje es equivalente a un suicidio social por lo que nos toca exprimirnos el cerebro para saber si la gente que va a la boda coincide con algún otro acontecimiento al que hayamos ido, y así poder amortizar el vestido que tenemos en el armario muerto de risa.

Siiiii eso lo hemos hecho todas!!, y deberíamos aprender de ellos y pasar más del tema para beneficio de nuestros bolsillos.

Una vez que mi amiga me entrega la tarjeta y la leo observo que al final del todo no hay otra cosa que un número de cuenta…ver escrito un número de cuenta no suele presagiar nada bueno a no ser que sea el tuyo, por lo que intuyo que me están pidiendo descaradamente que pague a pesar de que en el inicio del tarjetón ponía “os invitamos”, toda una lección de surrealismo.

Ya sé que lo de que te ingresen el dinero debe ser práctico, te evitas ir de mesa en mesa preguntando qué tal les parece la boda a los invitados cuando todo el mundo sabe a lo que vienes, pero no es obvio lo que tenemos que hacer cada vez que asistimos a uno de éstos ritos?, es necesario que nos recuerden el desembolso tan pronto?, no da un poco la impresión, aunque no sea verdad, de que el interés es el dinero?.

Sea lo que sea, de aquí a verano mi cuenta corriente se mermará un poco más de lo que ya está, espero que por lo menos después de dejarme un poco más pobre sea verdad eso de que sólo les separe la muerte.

12 comentarios:

calcetinrayado dijo...
21 de abril de 2009, 17:39

Yo...odio las bodas, sinceramente. No creo que el grupo al que te has referido sea tan reducido.

Odio tener que arreglarme para asistir a una celebración. Tampoco soy de vestidos. Y pongas lo que te pongas, los familiares (incluso los que hace años que no ves, ni casi te conocen) te van a venir con una gran sonrisa (falsa, la mayor parte de veces) y te van a decir lo guapa que estás, aunque no sea cierto y tú te sientas disfrazada y falsa.

Yo también lo veo una gran pérdida de dinero... la celebración en sí. Con lo fácil que es firmar unos papeles yendo con unos tejanos. Y después, durante varios días puedes hacer distintas celebraciones caseras con los distintos grupos de amigos/familiares.. ¿para qué juntarlos? Si sabes que no se llevarían bien, o algunos se llevan a matar... lo veo muy falso todo.

Lo del número de cuenta en la invitación, lo encuentro ya... demasiado heavy.

Es sólo mi opinión xD ¡¡Saludos!!

Simone Marie dijo...
21 de abril de 2009, 17:48

Bueno, yo opino como tu Krys, está claro.De momento no está en mis planes casarme, pero si algún día lo hago será como tu dices, en vaqueros, con mi pareja y un testigo.La celebración unos días después como una cena cualquiera, aunque más especial, y donde nadie estará obligado a regalar, ni mucho menos a pagar, para eso es una invitación..

calcetinrayado dijo...
21 de abril de 2009, 19:14

Jeje. En mis planes tampoco, soy demasiado joven y además, me falta lo más importante! La pareja! XDD Pero sí tengo muy claro que si me llego a casar (que lo dudo mucho) no va a ser lo típico.

satrian dijo...
21 de abril de 2009, 19:50

Es difícil no ver toda la superficialidad y el egoismo monetario, que subyace en todos estos actos, cuando debía ser como en todo en la vida, una celebración del amor, un acto donde el asistente va porque quiere ser partícipe del momento precioso de esa pareja, y esa pareja quiere que el asistente esté allí para que disfrute con ellos, no para sacar dinero, no para quedar bien, no para cumplir obligaciones sociales, no para lucir nuevo novio o novia, no para tener que gastarse una ingente cantidad de dinero y más en estos tiempos, trajes, regalos, cuenta del banco, o lo que sea, pero las rutinas sociales de la realidad pueden más que los sueños del amor.

Sonia dijo...
21 de abril de 2009, 20:35

Las bodas son un negocio, nadie se casa ya por amor.

Me encanta tu blog.

Besines

Mina dijo...
21 de abril de 2009, 20:41

Yo tambien tengo panico a las bodas. Como Krys tambien odio arreglarme para ir a ellas. Odio a aguantar a toda la gente con su falsa sonrisa pensando lo romantico y lo bonita que ha sido la boda. Lo puedo llegar a entender si eres religioso pero si no creo que todo eso es practicamente una mentira.

Simone Marie dijo...
21 de abril de 2009, 20:48

Sonia: Yo sí creo que la gente se casa opr amor, sólo que creo que todo puede ser mucho más sencillo, quieres a tu pareja y quieres sellarlo mediante papeles y que todo el mundo lo vea, es una idea preciosa, pero bajo mi punto de vista no hace falta tanta parafernalia.

Krys y Mina: Me alegro de que haya más mujeres en el clun de "odio las bodas",nosotras tenemos la fama de querer casarnos siempre.

Satrian: Dejar a un lado las malditas rutinas sociales, sigue siendo hoy por hoy por desgracia un tema a superar.

seriéfilo dijo...
21 de abril de 2009, 21:06

es que el mundo bodas de las mujeres es una cosa aparte, nosotros nos ponemos el traje y punto y pelota. !Que bonito es ser hombre en estos casos!

Principessa dijo...
22 de abril de 2009, 17:49

Holaaa!!! no sé como he llegado aquí, pero me gusta este blog mucho!! en cuanto a las bodas...yo tiendo a llevaros un poquillo la contraria, y al mismo tiempo la razón (risas) me encantan las bodas, pero también veo que en algunos casos son un derroche de dinero mortal, y digo yo:¿por fuerza hay que hacerle un regalo a los novios?, yo es que esa parte la ve más algo patetico, tu invitas a quien quieras a tu boda, pero sin necesidad de que te regalen algo, eso es tener demasiado "cara dura" (risas)¿pero que le vamos a hacer? por mucho que nos quejemos por eso, no cambiará nada.

P.D.: Me ha alegrado encontraros aquí. Enacantada de conoceros!!!

Simone Marie dijo...
22 de abril de 2009, 20:44

Totalmente de acuerdo Principessa,sólo se debería invitar de corazón, sin esperar nada a cambio, pero ese día será difícil que llegue.
Encantada de conocerte tb, y gracias por comentar!!

hesisair dijo...
23 de abril de 2009, 20:41

Hola!!! Las bodas y yo somos incompatibles, me producen una desgana brutal (y ya, si son familiares me producen simplemente asco).
¿Por qué en una boda todo el mundo se preocupa en saber cuál es tu situación e intentar darte consejos? ¡Qué me dejéis en paz, ya tengo yo suficiente con lo mío!
Y lo de la sangría económica... pero ésa ya es otra historia...

Simone Marie dijo...
23 de abril de 2009, 20:45

Jajaja Hesisair...muy buen punto de vista éste que acabas de dar..no había comentado en la entrada la afición de los familiares a arreglarte la vida..ese sí que es otro tema..

Gracias por visitarme!!